Las tonas oaxaqueñas o talla en madera, también se les conoce mundialmente como alebrijes, son la artesanía mexicana que magnifica el color para crear hermosas piezas, inspiradas en animales de diferentes formas.
El surrealismo es parte de estas tallas, ya que el aspecto de los animales puede combinar a especies; por ejemplo: caras de conejos con colas de gatos, incluso podemos ver animales unidos a plantas.
La realización de alebrijes no es una práctica tan antigua. Este nombre tiene su origen en la década de los treinta, donde el artesano Pedro Linares soñó este nombre durante un episodio de fiebre; y con el tiempo comenzó a realizar estas obras, pero no en madera sin en papel maché.
Hoy en día, los alebrijes son una artesanía mexicana vinculada a nuestro estado de Oaxaca y al misticismo asociado a los nahuales.
La madera del copal se talla para darle forma a los alebrijes, una vez creado, se pinta con una paleta multicolor que crea seres fantásticos. Así cada pieza es única y elaborada a mano, por lo que la mano de cada artesano determina el diseño y el valor estético del Alebrije.
Estas piezas no sólo se exportan a todo el país, sino a naciones de Europa y Asía.
El artesano Manuel Jiménez Ramírez introdujo a Oaxaca el concepto de Linares y lo transformó en madera y es lo que hoy conocemos como alebrijes.
En esta seccion te compartimos el trabajo de maestros artesanos de San Antonio Arrazola, Oaxaca
